Más de 10 mil pobladores de la ciudad de Arequipa, al sur del Perú, realizaron un contundente paro regional en las últimas horas, bloqueando las principales carreteras de acceso a la ciudad.
Miles de manifestantes cerraron el puente Añashuayco, con el objetivo de interrumpir el tránsito de vehículos interprovincial hacia las ciudades de Puno y Cusco.
La población arequipeña realizó el paro con el objetivo de llamar la atención del gobierno central exigiendo la modificación de la actual Ley de Gravamen Minero. Los manifestantes exigieron que el dinero que aportan las empresas mineras, por la explotación que se realiza en Arequipa, debe permanecer en dicha región y no irse a la ciudad de Lima.
El dirigente arequipeño, Felipe Domínguez, explicó que el 70 por ciento del gravamen minero debe quedarse en la región de donde se extraen los minerales. El otro 30 por ciento restante debe ir para el Gobierno central que debe distribuirlo entre las regiones que no cuentan con minería.
En un principio, los pobladores del Cono Norte de Arequipa planearon efectuar un paro indefinido. Sin embargo, horas después de haber iniciado la protesta, acordaron realizar una tregua hasta el próximo 30 de abril.
La población de Arequipa exigió que se implemente una mesa técnica que esté integrada por representantes del Consejo de Ministros, con la finalidad de discutir la modificación de la Ley de Gravamen Minero. (PULSAR)
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Felipe Domínguez, dirigente arequipeño: (Audio RPP) (703 kB)
