Este lunes, el presidente Enrique Peña Nieto presentó la propuesta de reforma en materia energética, misma que permitiría la inversión de la iniciativa privada en este sector.
Con esta reforma, la cuarta presentada este año como parte del Pacto por México, se pretende fortalecer y modernizar la Comisión Federal de Electricidad (CFE) y la paraestatal Petróleos Mexicanos (Pemex).
En el acto de presentación de la iniciativa, que fue turnada al Senado de la República para su posible aprobación, el primer mandatario mexicano reiteró que “Pemex no se vende ni se privatiza”, sino que se mantiene, al igual que la CFE, como propiedad de la nación.
Al mismo tiempo, indicó que con la reforma a los artículos 27 y 28 constitucional en materia energética, se crearán nuevos empleos y tanto el precio de la luz y como del gas serán más bajos.
Con la celebración de contratos de “utilidad compartida” con capital privado en el sector, señaló el jefe de Estado, se producirán 3 millones de barriles diarios para el año 2018; actualmente se producen 2.5 millones de barriles diarios.
Sobre el tema, el coordinador del partido de oposición Acción Nacional (PAN) en el Senado, Jorge Luis Preciado, dijo que con la reforma no se busca privatizar Pemex o la CFE, pero sí se busca que haya más competitividad en el sector.
Por el contrario, el excandidato presidencial y líder nacional del izquierdista Movimiento Regeneración Nacional (Morena), Andrés Manuel López Obrador, aseguró que la reforma energética es “el robo del siglo” y que es un engaño el decir que Pemex es una empresa en quiebra.
De acuerdo con el presidente Enrique Peña Nieto, la Reforma Energética retoma “palabra por palabra” la iniciativa del exmandatario Lázaro Cárdenas, quien expropió el petróleo mexicano en 1938. (PÚLSAR)
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Jorge Luis Preciado, coordinador PAN en el Senado.: (294 kB)
Andrés Manuel López Obrador, excandidato presidencial.: (340 kB)
