Las fuerzas especiales antidisturbios de la policía nacional de Nicaragua desalojaron con gases lacrimógenos a unas mil 200 familias que ocupaban unos terrenos en las afueras del municipio de Ciudad Sandino, ubicado en la salida occidental de Managua.
En el desalojo resultaron afectados varios niños y ancianos de estas familias que tenían unos dos meses de ocupar esos terrenos, argumentando que se asentaron en el lugar porque son tierras estatales y aseguran que no tienen dónde vivir.
En el desalojo se reportaron unas cinco personas heridas y unos 53 detenidos, en su mayoría jóvenes, que se enfrentaron a las fuerzas antidisturbios.
El vocero policial, Fernando Borge, dijo que días antes trataron de persuadir a estas personas para que abandonaran de forma pacífica los terrenos, pero al no hacerlo tuvieron que actuar bajo orden judicial por tratarse de terrenos privados.
Por su parte, estos terrenos con copias de documentos legales aseguraron que estas tierras son estatales y que por tanto, demandan al gobierno del presidente Daniel Ortega y a las autoridades locales del municipio de Ciudad Sandino una respuesta.
Las familias desalojadas se trasladaron a protestar frente a la alcaldía de Ciudad Sandino y después de su manifestación lograron que las autoridades les dieran cita para abordar su demanda el próximo martes 2 de abril.
Asimismo, aseguraron que están dispuestas a pagar en cuotas esos terrenos o cualquier otro sitio donde los ubiquen para poder construir sus viviendas, porque no tienen dónde vivir.
A pesar de los programas habitacionales del Estado, se estima que en Nicaragua hay un déficit de más de 100 mil viviendas y aunque en los últimos 10 años se observan numerosas urbanizaciones privadas por todo el país, estas son inaccesibles por sus precios para las familias empobrecidas. (PÚLSAR)
Nelson Rodríguez – Nicaragua
