Una campaña internacional liderará el Gobierno de Venezuela contra la utilización de la nociva técnica del fracking.
También rechazará las pretensiones de los Estados Unidos de acabar con la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP).
El presidente venezolano Nicolás Maduro responsabilizó a Washington del empleo de este método de fractura hidráulica, conocido como fracking, que tiene graves consecuencias para el medio ambiente.
“El fracking o fracturación hidráulica es un procedimiento que atenta contra el cuidado del medio ambiente y la salud de las personas”, indicó Heryck Rangel, coordinador Nacional del colectivo Ecológico de Venezuela (Ecoven).
Rangel señaló que esta práctica contamina y perjudica a las generaciones futuras. “Puede llegar a contaminar acuíferos e incluso masas de agua en la superficie”, afirmó.
Desde finales de junio los precios del petróleo han experimentado una baja de 40%, lo que afectado el equilibrio del mercado y las relaciones entre los países productores y consumidores de energía.
Esta situación ha sido provocada en gran medida por el aumento de la producción de gas y petróleo, por parte de los Estados Unidos.
Para extraer este tipo de crudo no convencional, EEUU emplea el método de fracking que posibilita la extracción del gas y el petróleo del subsuelo, mediante las perforaciones de pozos.
Para ello se realiza la inyección de agua, arena y productos químicos en la roca madre, situada a gran profundidad, para provocar el flujo de gas y su salida al exterior.
Estados Unidos justifica su uso, argumentando la necesidad de reducir su dependencia del petróleo extranjero.
Lo que el gobierno norteamericano no dice es que el fracking también llega a cumplir el propósito político de inundar de crudo el mercado internacional de hidrocarburos para ocasionar la caída de los precios, aseguran las autoridades venezolanas. (Pablo Florencio Salazar – Agencia Púlsar)
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Heryck Rangel, coordinador Nacional del colectivo Ecológico de Venezuela (Ecoven): (582 kB)
