Exigió la inmediata anulación del edicto que otorgó más de 400 mil hectáreas a la industria maderera.
Según el estudio encargado por el Ministerio Público Federal del estado de Pará, el territorio concedido por el Servicio Forestal Brasileño está ocupado por comunidades tradicionales.
Además, el área está próxima a la Tierra Indígena Munduruku y existen evidencias de que población indígena hace uso de los mismos recursos forestales.
Según la legislación brasileña, no está permitida la concesión forestal en áreas donde vive población tradicional.
El Ministerio Público expresó que el Servicio Forestal debe cumplir con la legislación y garantizar el derecho a la consulta previa, libre e informada. Indicó que debe hacerlo toda vez que las medidas puedan afectar a comunidades afectadas por el Convenio 169 de la Organización Internacional del Trabajo.
La recomendación del procurador Carlos Raddatz Cruz fue que el Servicio Forestal se abstenga de promover la concesión hasta realizar un estudio antropológico completo sobre las poblaciones del área conocida como Crepori, en Jacareacanga, en el estado de Pará.(PULSARBRASIL)
