“El Gobierno Nacional y las FARC hemos alcanzado un acuerdo para que se ponga en marcha, la Comisión para el Esclarecimiento de la Verdad, la Convivencia y la No Repetición”.
Esa fue la declaración histórica que anunciaron en conjunto, hace unos días, el gobierno de Juan Manuel Santos y las Fuerzas Armadas Revolucionaria de Colombia, FARC.
Esta Comisión significa asumir y reconocer las respectivas responsabilidades sobre hechos del conflicto armado que dura más de 50 años.
El gobierno colombiano y la guerrilla de las FARC también explicaron que la Comisión para el Esclarecimiento de la Verdad será “un mecanismo independiente e imparcial de carácter extrajudicial”.
La Comisión de la Verdad colombiana tendrá sus particularidades. Por ejemplo, tendrá independencia y autonomía para actuar durante tres años. Luego de ello entregará al país y al mundo un informe sobre las responsabilidades de los hechos de violencia en Colombia.
Según el anuncio, la Comisión creada no tendrá el carácter de instancia judicial.
“La Comisión tendrá como mandato esclarecer y promover el reconocimiento de las responsabilidades colectivas del Estado, de las FARC, de los paramilitares, así como de cualquier otro grupo, organización o institución, nacional o internacional que haya tenido alguna participación en el conflicto”, fue el anuncio de ambas partes.
La Comisión nace inspirada en experiencias de otros países como la Comisión de la Verdad y Reconciliación de Perú, la Comisión Nacional Sobre la Desaparición de Personas en Argentina; la Comisión Nacional de la Verdad en Brasil y la Comisión para el Esclarecimiento Histórico en Guatemala, que se crearon después de graves épocas de violencia. (Agencia Púlsar)