En Río de Janeiro, las Unidades de Policía Pacificadora (UPP) a menudo son denunciadas por abuso de autoridad y actos de violencia.
En la noche del pasado martes 12, varios residentes de una comunidad pacífica en el Complejo de Alemao, denunciaron que fueron víctimas de la policía.
Varios vecinos terminaron en la comisaría luego de ser acusados de desobediencia.
El Complejo de Alemao es un conjunto de favelas ubicado al norte de la ciudad de Río de Janeiro
El periodista y reportero gráfico, Carlos Coutinho, es miembro del grupo de comunicación independiente “Papo Reto” y fue testigo de los hechos.
Coutinho afirma que que durante la operación policial fue objeto de abuso por parte de un teniente de nombre Yago, que es el comandante adjunto de la Unidad de Policía Pacificadora (UPP) de Alemao.
Según el testimonio del comunicador, los efectivos policiales realizaorn una serie de actitudes abusivas. Al darse cuenta de la conducta del teniente Yago, Carlos Coutinho decidió grabar la discusión.
El comunicador considera que la población de las favelas tienen que estar más informados sobre sus derechos, para poder enfrentar este tipo de situaciones en que se vulneran sus derechos.
Muchas veces los residentes de las favelas permiten estos abusos policiales y no realizan las denuncias debido a que no saben cuáles son sus derechos.
Actualmente en Río de Janeiro, existen 38 Unidades de Policía Pacificadora (UPP) conformadas por más de nueve mil 543 agentes policiales.
La instalación de estas unidades ha sido establecida por el gobierno como una de las medidas de seguridad de los megaeventos deportivos, tanto para la pasada Copa del Mundo del 2014 como para los próximos Juegos Olímpicos del 2016. (Púlsar Brasil)