El Colectivo por una Política Integral Hacia las Drogas (CuPIHD) presentó los datos de la Primera Encuesta de Usuarios de Drogas Ilegales y Derechos Humanos en la Ciudad de México.
El estudio realizado a 429 personas detalla que los consumidores de mariguana iniciaron con este hábito a los 16 años, mientras que quienes inhalaron solventes lo hicieron desde los 14. años, justo después de consumir alcohol.
Por otra parte, 9 de cada 10 consumidores tiene trabajo y el 54% tiene estudios universitarios. Además, el 20% de los encuestados reveló que inició el consumo de alguna droga en casa y más del 16% en la escuela; 32% lo sigue haciendo en casa y un porcentaje igual en sitios diversos.
La encuesta revela que el 64% de los usuarios aceptó que tuvo relaciones sexuales sin protección, un 9% fue forzado a tener sexo, mientras que un 34% de los encuestados aceptó haber sido golpeado. El 24% de los encuestados dijo tener conductas suicidas.
El estudio también señaló que 3 de cada 4 usuarios de drogas se sienten discriminados y que el 21% de consumidores han sido extorsionados y agredidos de alguna manera por elementos de la policía. El 11% ha sido molestado por familiares.
En cuanto al abastecimiento de drogas, el 33% lo hace en locales comerciales de manera ilegal, un 17% vía telefónica , otro 11% con amigos y un 29% por otros medios.
El presidente de la Comisión de Derechos Humanos del Distrito Federal (CDHDF), Luis González Placencia, llamó a derribar los mitos en torno al consumo de drogas y urgió a hacerlo desde una perspectiva de derechos humanos.
Durante la presentación de esta encuesta, dijo que una de las tareas del Estado debe ser la de procurar el respeto de todos los estilos de vida, independientemente del consumo de drogas, pues dijo que una visión que castiga el fenómeno no lo resuelve, sino lo dificulta aún más.
Por todo ello, exhortó a analizar el efecto de la discriminación y la estigmatización que orilla al consumo clandestino en el mercado ilícito de drogas y trabajar para que su consumo sea aceptado como un comportamiento que existe. Esto, dijo, permitirá a los consumidores exigir mejores sustancias, menos contaminadas o degradadas, a mejores precios y disminuyendo efectos secundarios y nocivos.
Mientras que el representante en México de la Oficina de Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC), Antonio Mazzitelli, reiteró la necesidad de no criminalizar al consumidor ni el consumo de drogas.
“Para Naciones Unidas, los usuarios son enfermos que necesitan tratamiento y rehabilitación, no penas”, señaló Mazzitelli.
No obstante, indicó que la rehabilitación y el tratamiento deben ser totalmente consentidos, en el marco de la seguridad y el respeto social hacia las personas consumidoras, aun de las que tienen problemas con su consumo o abuso.
Resaltó además que es necesario romper con el círculo de estigmatización de los consumidores.
La encuesta fue presentada en el momento en el que la violencia en Méxco se incrementó como consecuencia de la estrategia impulsada para enfrentar a los bandas de narcotraficantes
Las ejecuciones ligadas al enfrentamiento entre carteles de la droga y las fuerzas armadas dejaron un saldo de 60 mil muertos de 2006 a 2012, durante el sexenio del entonces mandatario Felipe Calderón.
En ese entonces, el Ejecutivo impulsó una estrategia gubernamental para combatir al narcotráfico; la táctica incluyó el envío de militares a zonas donde la policía era ineficiente o estaba infiltrada por los grupos delictivos.
De momento la violencia se ha cobrado la vida de unas 775 personas durante el mandato del ahora presidente mexicano Enrique Peña Nieto. (Alejandro Pacheco, PÚLSAR)