El pasado 31 de octubre, la Corte Constitucional de Ecuador aprobó la legalidad de un conjunto de enmiendas a la Carta Magna.
Dichas enmiendas fueron propuestas por el partido Alianza País para ser tratado por la Asamblea Nacional (Parlamento), sin necesidad de convocar a una consulta popular.
Una de las enmiendas permitiría la reelección indefinida para cargos de elección popular.
El presidente de Ecuador, Rafael Correa, negó que las enmiendas propuestas por la gobernante Alianza PAIS, alterarán la estructura del Estado.
Correa apuntó que la enmienda relacionada con la reelección indefinida otorga a la ciudadanía el derecho a decidir libremente sobre la alternancia en el poder.
“Las personas que no quieren reelección indefinida pueden votar en contra, pero de la misma forma, los que están a favor también pueden hacerlo”, aseveró el mandatario.
Por su parte, cuarenta organizaciones, lideradas por el excandidato presidencial Guillermo Lasso presentaron ante el Consejo Nacional Electoral una solicitud para convocar a un referendo sobre la reelección indefinida en el país.
La decisión de la Corte Constitucional ha provocado la reacción de la dirigencia política y social del país. Para la oposición, se trata de la construcción de un caudillismo.
“Correa no tiene relevo porque su organización política no es más que una estructura de culto a su personalidad; además, para ellos la reelección es un mecanismo indispensable de impunidad”, comentó Marta Roldós, activista política.
Por otro lado, el partido oficialista Alianza PAIS rechazó la propuesta opositora de convocar a una consulta popular sobre la reelección indefinida en Ecuador.
El oficialismo defendió la decisión de la Corte Constitucional a favor de tramitar esa enmienda a nivel legislativo. (Pablo Florencio Salazar – Agencia Púlsar)