Para abril del 2011, de las 21 frecuencias disponibles para televisión digital terrestre (TDT) fueron adjudicadas solo 11 debido a que las cadenas de TV abierta no lograron acceder al financiamiento japonés por no alcanzar los requisitos que habían sido solicitados, esto debido a la incompatibilidad de los préstamos con la situación financiera de las operadoras.