En la ciudad colombiana de Medellín, las empleadas domésticas se están organizando para criticar las condiciones de esclavitud que sufren muchas de ellas cuando realizan sus labores.
En dicha ciudad se ha creado el primer sindicato de empleadas domésticas de Colombia con el objetivo de proteger los derechos de las trabajadoras del hogar, como por ejemplo acceder a las prestaciones sociales y las horas extras.
Este sindicato ha denunciado una serie de discriminaciones y abusos contra las empleadas domésticas por parte de sus patrones. También critican que las actuales leyes colombianas no toman en cuenta a las empleadas domésticas y siguen permitiendo esta discriminación.
Estos problemas que aquejan a las trabajadoras del hogar siguen agudizándose en Colombia a pesar que este país firmó el convenio 189 de la Organización Internacional del Trabajo, OIT, que ampara los derechos de las trabajadoras domésticas.
El reciente estudio de la empresa Dane informó que en Colombia existen 742 mil personas dedicadas al servicio doméstico. Cerca del 90 por ciento están en condiciones de desventaja.
La empleada doméstica Ana Salamanca, es dirigenta del sindicato de trabajadoras del hogar y explica que la organización nació con la finalidad de ser visibilizadas. “Queremos que la sociedad nos vea como trabajadoras. No somos esclavas”, aseveró. (PULSAR)
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Ana Salamanca, dirigenta del sindicato de trabajadoras del hogar : (414 kB)
