Por iniciativa del Portal de la sociedad civil Magreb Mashreq E-Joussour, proyecto del Forum des Alternatives Maroc (Foro de las Alternativas Marruecos – FMA), en colaboración con la Asociación Mundial de Radios Comunitarias (AMARC) y con apoyo de International Media Support (Organización de Apoyo a los Medios de Comunicación - IMS), más de 60 integrantes de organizaciones sociales, periodistas, bloggers, expertos, formadores, operadores, medios de comunicación, debatieron del 5 y al 8 de diciembre de 2011 en Marrakech, Marruecos, sobre medios públicos, radios comunitarias y asociativas desde una perspectiva que busca promover la información ciudadana en Marruecos.

Con la participación de coordinadores y especialistas en redes de medios comunitarios de todo el mundo, que vinieron desde América Latina (Argentina, Brasil), África (Ghana, Senegal, Níger, Egipto, Túnez), Medio Oriente (Palestina) y Europa (Francia), el trabajo y los talleres de este seminario refirieron específicamente a los marcos legales, la regulación y autorregulación para promover que este sector de interés público aporte a la democratización del campo mediático nacional.

Después de intercambios en torno a los principios y normas internacionales recomendadas (especialmente por la UNESCO), y al conocer experiencias eficientes en el mundo, las y los participantes adoptaron la Declaración de Marruecos, que declara y proclama que:

1.      En la elección de la democracia, irreversible para la sociedad de la región de Magreb Mashreq, un campo mediático diverso y democrático, nutrido por la participación efectiva y por una apropiación protegida y legítima de la expresión mediática por los ciudadanos, debe constituir un principio decisivo para las sociedades y sus modos de gobierno en todos los niveles y en todos los ámbitos de la vida colectiva.

2.      Todo medio de comunicación, dedicado a la democratización del Estado y de la sociedad y a una ciudadanía activa, especialmente a través de los medios comunitarios, debe estar orientado y encuadrado por principios de derechos humanos, conforme lo establece la Declaración Universal de los Derechos Humanos, así como por la ética y la deontología de los medios de comunicación tal como lo estipulan las declaraciones mundialmente adoptadas y promovidas en y por los medios profesionales.

3.      Como se demostró claramente, las formas e iniciativas ciudadanas de toma de la palabra, especialmente el ciberactivismo de la juventud de la región del Magreb Mashreq, el “derecho a la comunicación” es más que nunca un derecho inalienable, un derecho moderno y decisivo para el destino de los pueblos, que debe ascender a un nivel avanzado en el marco de los Derechos Humanos y los modelos recomendados internacionalmente para una gobernanza adecuada y democrática.

4.      Para que el sector de los medios comunitarios cumpla su papel pertinente a la promoción de una cultura y una gobernanza democráticas, participativas y ciudadanas, es necesario que las normas y  prácticas de esta gobernanza y esta cultura sean respetadas y constantemente promovidas en su seno y en todas las actividades de cada radio comunitaria: en su forma de organización, en su funcionamiento, en sus modos de financiamiento, en su gobernanza, en sus contenidos, etc. En este sentido, todos los participantes del Encuentro de Marrakech adoptan los principios y normas recomendadas por AMARC y por las múltiples experiencias de medios comunitarios eficaces a través del mundo, que son puntos de referencia que orientan sus prácticas e iniciáticas en el seno de la sociedad.

5.      Los medios de comunicación comunitarios podrán aspirar a un papel social de tal relevancia sólo si su razón de ser y el sentido de sus prácticas, en tanto medios sin fines de lucro, están estrictamente definidos  a partir y en función de las comunidades donde están insertas, es decir, un grupo de ciudadanos movilizados por objetivos comunes y compartidos -sean éstos de orden social, cultural, económicos, etc.-. Una radio comunitaria o asociativa emerge de un grupo o asociación que la gestiona, desarrolla y produce sus contenidos y evalúa regularmente el impacto de su misión.

6.      Marruecos, tomando el ejemplo de varios países de la región de Magreb Mashreq, donde el dinamismo actual, sin precedentes, de la ciudadanía y las sociedades civiles en la esfera mediática (medios de comunicación y nuevas tecnologías), pusieron a prueba el derecho a la comunicación, se encuentra interpelado, junto con su juventud, a consagrar solemnemente este derecho y, en consecuencia, a promover el necesario encuadramiento normativo para el sector de los medios comunitarios para que su legitimidad y su libertad de acción sean establecidos en los planes institucional y político, en tanto tercer sector y actor de los medios de comunicación, junto a los medios públicos y privados comerciales.

7.      Para que este sector emerja y se fortalezca en el campo mediático nacional, es imprescindible que el tejido colaborativo y la vocación local, como el mundo de las ONGs y los defensores de Derechos Humanos, de la libertad de expresión, del derecho a la información y el derecho a la comunicación, sean parte de asociaciones y redes para difundir y consolidar los argumentos necesarios, incentivar y apoyar toda iniciativa de creación de medios comunitarios (a través del espectro radioeléctrico o radios en Internet), ayudar en la formación profesional y formas de liderazgo.

8.      Las decenas de iniciativas marroquíes en gestación, entre ellas las radios en Internet y otros portales, deben posicionarse a la vanguardia para la realización de este objetivo de argumentación y de construcción de redes, con el apoyo, ya adquirido, del resto del mundo asociativo nacional como de aliados internacionales, tal el ejemplo de AMARC que reúne a 4.000 miembros (medios de comunicación y redes) en 115 países del mundo.

Para más información:

www.e-joussour

www.amarc.org

www.unesco.org

 www.ims