Allí manifestaron que la presencia del presidente Manuel Zelaya en Tegucigalpa es "un acto promovido y consentido por el Gobierno de Brasil".

Por ese motivo, el régimen responsabilizó a Brasil "por la vida y seguridad del Señor Zelaya y por los daños a la integridad física de las personas y las propiedades" que se encuentran en los alrededores de su embajada.

Por su parte, el presidente brasileño, Luiz Inacio Lula Da Silva, se presentó este miércoles como primer orador en la Asamblea General de la ONU en Nueva York.

En su discurso exigió al Gobierno de facto respeto a la sede diplomática de su país en Honduras.

A la vez, Da Silva aseguró que "la comunidad internacional pide que Zelaya regrese inmediatamente a la presidencia de su país". (PÚLSAR)

gf
24/09/2009





Audios disponibles:

Roberto Micheletti, presidente de facto de Honduras (equivocación de comunidad internacional)
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