Hubo momentos de tensión este martes cuando la presencia policial impidió el encuentro de la marcha indígena y la contra-marcha de los campesinos llamados colonizadores.

La contra-marcha de colonizadores cuestiona la movilización indígena. Además, defiende la construcción de la carretera que unirá Beni y Cochabamba. Aseguran que beneficiará su actividad.

Desde el pasado 15 de agosto, unos 600 indígenas bolivianos se movilizan hacia La Paz. Rechazan el segundo tramo de esta carretera porque atravesará el Territorio Indígena Parque Isiboro Sécure, conocido como TIPNIS.

El vicepresidente, Álvaro García Linera, aseguró que la presencia de más de 400 policías en la zona busca evitar los enfrentamientos. Expresó que la Policía tiene la orden de no usar armas letales ni reprimir a los marchistas.

Linera aseguró que "el Gobierno tiene la intención de garantizar la marcha, pero al mismo tiempo ha convocado en forma reiterada a dialogar".

El Vicepresidente aseguró que "la carretera es la decisión estratégica más importante de Bolivia de los últimos 50 años". Aseguró que se trata de una "sutura para unir regiones".

Por último, señaló que es posible lograr que la carretera atraviese el borde del TIPNIS sin ingresar al corazón del territorio.(PÚLSAR)