En la ciudad boliviana de El Alto, la Federación de Juntas Vecinales de esa localidad reclamó la realización de un Censo Nacional de Vivienda. Según los manifestantes, esto les otorgaría mayores recursos para el desarrollo de infraestructura, salud y educación.

Como medida de protesta realizaron un paro que fue acatado de forma parcial sin lograr paralizar las actividades en la ciudad alteña.

Por otro lado, la llamada Marcha Indígena comenzó una caminata desde la ciudad de Trinidad, capital del departamento oriental de Beni, hacia la sede del Gobierno boliviano en la ciudad de La Paz.

Unas mil 500 personas reclamaron por la defensa del Territorio Indígena Parque Isiboro Sécure (TIPNIS). El mismo se encuentra amenazado por el plan de construcción de carreteras propuesto por el Gobierno.

Otra de las protestas fue llevada adelante por organizaciones sociales de la ciudad de Potosí. Exigen la construcción en esa ciudad de un aeropuerto, una fabrica de cemento y la solución al conflicto de límites con el departamento de Oruro.

En el departamento de Tarija, un grupo de campesinos realizó un corte de rutas reclamando la reglamentación del pago de un bono por producción agrícola.

El presidente de Bolivia, Evo Morales, calificó como acciones políticas contra su Gobierno a las manifestaciones realizadas este lunes. Sin embargo, señaló estar abierto al diálogo con los sectores movilizados.  

Las demandas de estos sectores se intensifican en el marco de las elecciones judiciales previstas en Bolivia para octubre próximo. (PÚLSAR)