Por ello la misión se propone, en primer lugar, tener un "panorama certero de la situación de las radios, de las necesidades y posibilidades en este contexto".

Y a partir de estos datos, colaborará en la reinstalación de las emisoras y en la generación de algunos sistemas de emergencia para que se puedan retomar las comunicaciones.

La Misión cuenta con el apoyo de la organización local Unión Dominicana de Emisoras Católicas (UDECA), integrante de la Asociación Latinoamericana de Educación Radiofónica (ALER).

Según la Asociación de Radios, incluso antes de la catástrofe natural Haití ya "enfrentaba enromes problemas de infraestructura de comunicaciones y de transporte, de acceso a electricidad y elevados niveles de analfabetismo".

En ese contexto, el desarrollo a partir de 1992 de las radios comunitarias se tornó "un componente esencial del contexto mediático" del país centroamericano "al llegar a las comunidades más pobres y permitir que participen en el desarrollo".

AMARC emprendió la Misión al tener en cuenta esta apreciación, y al evaluar que "los medios comunitarios cumplen un rol vital en momentos de urgencia y de desastre".

Al mismo tiempo, ALER y AMARC América Latina y Caribe, con el apoyo de UDECA, realizarán una cobertura periodística conjunta sobre la situación en Haití. (PÚLSAR)

gf
25/01/2010




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