La Presidenta llamó este lunes a gobernadores y alcaldes a realizar un “gran pacto nacional” con 5 ejes fundamentales. Allí sobresale la iniciativa de impulsar una asamblea constituyente para avanzar con una reforma política en Brasil.
Se trata de la respuesta del Ejecutivo brasileño a las recientes protestas callejeras en las principales ciudades del país.
La propuesta fue lanzada luego de la reunión que mantuvo la Presidenta con gobernadores y alcaldes, y luego de su encuentro con la organización que impulsó las primeras manifestaciones.
El Movimiento Passe Livre reiteró allí su planteo de “tarifa cero” al transporte público, que fue rechazado por la Mandataria por considerarlo inviable.
Según explicó Rousseff, la propuesta es realizar “la construcción de una amplia reforma política que amplíe los horizontes de la ciudadanía”.
Un punto del acuerdo señala el carácter prioritario del combate a la corrupción y su configuración como “delito gravísimo”.
La Presidenta también impulsó un acuerdo por la “responsabilidad fiscal para garantizar la estabilidad económica y el control de la inflación”.
Otro de los ejes señaló la aceleración de las inversiones en salud y la contratación de más médicos.
Además, pidió “avanzar más rápido” en la construcción de medios de transporte público y planteó eliminar impuestos federales al combustible y la electricidad para el sector.
Por último, Rousseff volvió a proponer destinar a la educación el 100 % de las regalías generadas por las reservas de petróleo encontradas en la costa brasileña en el océano Atlántico.(PÚLSAR)
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Dilma Rousseff, en su discurso público (en portugués): (519 kB)
